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La importancia de las ventanas en la certificación Passivhaus

[SSB]

La certificación Passivhaus es una de las certificaciones de eficiencia energética de edificios más estricta a nivel mundial. Con base en Alemania, el Passivhaus Institut, creador e impulsor de dicha certificación, ha ideado una metodología que, hoy en día, se considera base para el diseño de edificios nZEB (Edificio de Consumo Casi Nulo).

Si bien, el alcanzar la certificación no es tarea fácil, el obtenerla demuestra la alta calidad de la construcción y dará a la misma un valor agregado altamente diferenciable, colocándola entre las 1953 edificaciones certificadas a nivel mundial.Para explicar la metodología de manera sencilla, suele presentarse como el cumplimiento de sus 5 principios básicos, que, si bien no son garantía de que se obtendrá la certificación, suelen ser una excelente guía para lograrlo. Los 5 principios básicos son:

Cada uno de estos puntos tiene su dificultad propia, sin embargo, hay uno de ellos que, si falla, comprometería el cumplimiento de 3 puntos más: las ventanas.

Al hablar de “ventanas Passivhaus” podemos estar haciendo referencia a ventanas certificadas por el propio Passivhaus Institut o a ventanas que cumplen con las características que pide el Passivhaus Institut para la región climática donde se instalarán. Es decir, no es obligatorio instalar ventanas certificadas. 

Las características que deben tener las ventanas para considerarse aptas para un proyecto Passivhaus son las siguientes:

Vidrio: 

  • Las ventanas deben contar con un vidrio insulado doble o triple.
  • De preferencia, el vidrio insulado debe estar armado con intercalarios o separadores de borde caliente o “warm edge”.
  • Debe contar con un Valor g o SHGC adecuado para el correcto aprovechamiento de la radiación solar en meses de invierno.
  • En caso de estar en zonas de alta radiación solar, debe contar con vidrios de control solar.

Sistemas de perfiles:

  • Deben usarse perfiles NO metálicos. La utilización de perfiles de fierro o aluminio (sin Rotura de Puente Térmico o RPT) permiten la transmisión de energía térmica entre el interior y el exterior, por lo que no deben usarse en una casa pasiva.
  • Los sistemas de perfiles más recomendados son de madera, aluminio con RPT o PVC.

Otras características:

  • Tanto el tipo de apertura de la ventana, como el herraje y las juntas de estanqueidad, tienen una influencia directa sobre la hermeticidad de la ventana. Lo ideal será evitar aperturas corredizas comunes, solicitar herrajes perimetrales y sistemas de perfiles con al menos 2 juntas de estanqueidad.
  • Las ventanas deberán instalarse alineadas con el aislamiento de los muros para evitar la creación de puentes térmicos. Además, deberán colocarse cintas de estanqueidad para evitar las filtraciones indeseadas de aire entre la ventana y la boquilla.

Sombreamientos:

  • Aunque no son obligatorios, sombreamientos como persianas venecianas exteriores suelen ayudar en gran manera a la protección solar del edificio, evitando el sobrecalentamiento en verano.

Es de suma importancia recordar que, como se mencionó anteriormente, no todas las ventanas Passivhaus funcionarán correctamente para todos los proyectos; la ventana ideal será definida de acuerdo con su ubicación geográfica, clima y orientación. 

Procura siempre contar con un asesor con los conocimientos básicos para poder orientarte y ayudarte a elegir la mejor ventana para tu proyecto. Las opciones son cientos y las combinaciones entre perfil y vidrio aún más, pero siempre habrá una que cumpla con todos tus requerimientos.

Colaboración: Ing. Francisco Arnés González

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